10 de Julio de 2024

Microbiota intestinal: El ecosistema dentro de ti

"Yo soy yo... y mi circunstancia" dijo hace mucho Ortega y Gasset. Más de 100 años después de aquella frase acuñada por este importante filósofo madrileño, la ciencia ha constatado que nuestro intestino está poblado por una enorme cantidad de microorganismos o “microbiota”

Por estos días parece que todo el mundo estuviera hablando de la importancia fundamental de la microbiota intestinal. A verces se nos pasa por alto que no todos estamos familiarizados con este tema. Entonces, para comenzar diremos que la microbiota intestinal es un complejo ecosistema de microorganismos que habitan en nuestro tracto gastrointestinal. Aunque a menudo pasan desapercibidos, estos diminutos seres desempeñan un papel fundamental en nuestra salud y bienestar general. Ahora exploremos qué es exactamente la microbiota intestinal, qué la compone y cómo influye en diversos aspectos de nuestra salud, de una manera simple de entender.

¿Qué es la microbiota intestinal? La microbiota intestinal está compuesta por billones de microorganismos, incluyendo bacterias, virus, hongos y otros microbios. La mayoría de estos microorganismos residen en el colon, aunque también pueden encontrarse en otras partes del tracto gastrointestinal. Esta comunidad microbiana es única para cada individuo y puede variar considerablemente en composición y diversidad. Es importantísimo que entendamos que cada persona tiene su microbiota intestina y que, aun cuando, otra persona pudiera tener alguna parecida, no podemos afirmar que sean iguales. Esto ya nos adelanta que los alimentos no los procesamos igual, que tendremos diferentes respuestas para mismos consumos.

¿Qué Funciones se conocen de la microbiota intestinal?

  1. Digestión y metabolismo: Las bacterias intestinales ayudan a descomponer los alimentos y a extraer nutrientes esenciales de ellos. Además, pueden producir vitaminas y otros compuestos beneficiosos para nuestro cuerpo. Es lo que nos enseñaron en el colegio cuando nos pasaban el aparato digestivo.
  2. Protección contra patógenos: La microbiota intestinal actúa como una barrera protectora, impidiendo que las bacterias dañinas y los virus patógenos se establezcan y proliferen en el intestino. La Dra. Sari Arponen lo explica muy sencillemente diciendo que aplican la ley del "busca otro lugar porque aquí ya estoy yo", es decir, al tener las bactarias en equilibrio en nuestro intestino, se impediría la proiferación de desequilibrios que hagan que algunas bactarias actuasen como patógenos.
  3. Regulación del sistema inmunológico: Las bacterias intestinales desempeñan un papel clave en la educación y regulación del sistema inmunológico, ayudando a distinguir entre sustancias inofensivas y potencialmente dañinas. Se establece que al menos el 70% de nuestro sistema inmunológico se encuentra en el intestino. ¡Vaya sorpresa, no!
  4. Producción de neurotransmisores: Algunas bacterias intestinales pueden sintetizar neurotransmisores como la serotonina, que desempeñan un papel importante en la regulación del estado de ánimo y el bienestar mental. Han tenido que desarrollar muchos estudios para demostrar esto, porque, la verdad, no era fácil de creer. Hoy se establecen vinculos entre microbiota y enfermedad de Parkinson, por ejemplo, que antes hubiésemos deschado como ideas locas.
  5. Mantenimiento de la barrera intestinal: La microbiota intestinal contribuye a mantener la integridad de la barrera intestinal, previniendo la filtración de toxinas y patógenos al torrente sanguíneo. Es decir que la microbiota no solo inhibe que los patógenos se establezcan sino que también les impode el paso al interior de nuestro organismo.

Todos los días nos llega algún resúmen de publicación de de otra importante funicón que se está estudiando entre microbiota y algún órgano, síntoma o dolencia en nuestro organismo.

Hoy sabemos que un desequilibrio en la microbiota intestinal, conocido como disbiosis, se ha asociado con una variedad de problemas de salud, que van desde trastornos digestivos como el síndrome del intestino irritable hasta enfermedades autoinmunes, obesidad, diabetes y trastornos mentales como la depresión y la ansiedad. Por lo tanto, mantener una microbiota intestinal equilibrada y diversa es esencial para promover la salud y prevenir enfermedades.

Como conclusión podemos decir que la microbiota intestinal es mucho más que una colección de bacterias en nuestro intestino, mucho más que unos "bichitos" que a veces molestan; es un ecosistema complejo y dinámico que influye en múltiples aspectos de nuestra salud y bienestar. Al comprender mejor la importancia de nuestra microbiota intestinal y cómo podemos cuidarla, podemos tomar medidas proactivas para mejorar nuestra salud digestiva, inmunológica y mental.

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Porqué quizas, después de todo, la frase más correcta hoy en día sea: "yo soy yo... y mi microbiota"