23 de Mayo de 2018

TRITEMP, termómetro sin mercurio

Evitar el mercurio es lo que ofrecen los termómetros TRITEMP, primer y único termómetro de precisión clínica sin necesidad de tocar al paciente.

«El mercurio es uno de los diez principales productos químicos de mayor preocupación para la salud pública y es una sustancia que se dispersa y permanece en los ecosistemas para las generaciones, causando graves problemas de salud y discapacidad intelectual a las poblaciones expuestas», explicó la directora general de la OMS, Margaret Chan, en octubre de 2013, al lanzar la iniciativa «Salud Libre de Mercurio en el año 2020» junto a la coalición internacional «Salud Sin Daño», formada por más de 470 organizaciones en unos 50 países.

El mercurio constituye una amenaza especial para el desarrollo del niño en el útero y temprano en la vida. Concretamente la inhalación de vapor de mercurio puede producir efectos perjudiciales en los pulmones y los riñones, en el sistema nervioso, digestivo e inmunológico; además, es corrosivo para la piel, los ojos y el tracto gastrointestinal, y pueden inducir toxicidad renal si se ingiere.

En la iniciativa Atención de Salud sin Mercurio para 2020, presentada para marcar la firma del Convenio de Minamata sobre el Mercurio, se insta a eliminar gradualmente los termómetros y los dispositivos de medición de la presión arterial que contienen mercurio. Este objetivo se logrará dejando de fabricar, importar y exportar esos dispositivos y respaldando el empleo de otros aparatos precisos, asequibles y seguros exentos de mercurio.

Un problema es que las alternativas si mercurio, en el caso de los termómetros, no tienen la misma precisión o su costo es demasiado elevado.

En Chile la mayoría centros de salud públicos comenzaron un plan para abandonar el uso de instrumental con mercurio debido a la alta toxicidad de este metal pesado.

Pese a que se cuentan entre los dispositivos más habituales en botiquines, hospitales y farmacias, los termómetros están lejos de ser un aliado para la salud.

Cada vez que uno se rompe, libera al medio ambiente su contenido de mercurio, un metal pesado altamente tóxico, que tiene efectos perjudiciales a nivel renal, respiratorio e inmunitario.

Y cuando las escurridizas bolitas plateadas llegan al agua, se convierten en metilmercurio, compuesto que contamina animales y peces y entra a la cadena alimentaria.

Evitar el mercurio es lo que ofrecen los termómetros TRITEMP, primer y único termómetro de precisión clínica sin necesidad de tocar al paciente.

Una buena noticia para las instituciones de salud chilenas que pueden contar con una alternativa real a los antiguos termómetros de mercurio, ayudando además a disminuir el contagio, ya que no toca al paciente y disminuye los tiempos de medida, demora menos de 3 segundos en indicar la temperatura del paciente.